Ya estamos en casa...
El parto fué muy bien, la verdad es que me alegro muchísimo de haber dado a luz en el H. Quirón, en todo momento fueron muy atentos y respetuosos y el parto que he tenido ha sido muy bueno y emotivo... Pero empiezo desde el principio...
El día 08 tuve revisión con mi ginecologa y al explorarme me dijo que estaba de 3cm y que el cuello estaba borrado, pero que aún podía tardar, así que le dijimos que por favor nos programara el parto porque nos daba miedo que el bebé estuviera dentro más allá de las 41 semanas...
Esa tarde la pasé regular, un poco revuelta pero sin contracciones. Por la noche empecé a sentirme peor y sobre las 02.00 ya no podía estar en la cama, tenía frío, me subió la fiebre y parecía que tenía contracciones aunque no tenía claro lo que eran... A las 02.30 le dije a mi marido que creía que teniamos que ir a urgencias pero no se creyó que estaba de parto y me invito a acostarme otro ratito (¡¡¡para matarleeeee!!!). A las 03.30 ya no podía más, había empezado a notar las contracciones demasido bien y demasiado rápido, y cuando empecé a controlarlas ya las tenía cada 3min y de más de 30seg, así que subí a la habitación y le dije a mi marido que o me llevaba al hospital o me iba sola, jeje, creo que se quedó alucinado de que de verdad estuviera de parto...
A las 04.00 estaba entrando por la puerta de urgencias y a las 07.35 tenía a mi pequeñín en brazos... En todo momento vi como salía mi niño gracias a un espejo que pusieron para que lo viese y no tuve episotomia ni desgarro, tan solo un par de puntos porque se abrió la cicatriz del parto anterior.
Fué todo genial, el peque estuvo todo el día con nosotros, super tranquilo, buenísimo..., sólo comer y dormir, y desde el primer momento se agarró fenomenal al pecho... El problema vino cuando le hicieron una analítica y dieron alto un par de valores, entonces la pediatra nos dijo que como yo había tenido el estreptococo en el embarazo tenían que ponerle 7 días de antibiótico para descartar el contagio de la bacteria... ufff... qué bajón... esa noche fué horrible, no podía dejar de llorar porque me hubiesen quitado así a mi niño...
Al final todo bien, después de una semana en el hospital mi peque está fenomenal y sigue siendo muy bueno, y afortunadamente a mi me dejaron estar allí 5 días, por lo que no he tenido qeu dejar de darle el pecho.
Rubén no lo lleva mal, aunque quiere abrazarle un poco fuerte y de vez en cuando le suelta algún mamporro "cariñoso"...
Y yo estoy feliz con mis dos soles
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